Hemos llegado a tal punto en el eclectisismo mexicano, que ya no sabemos qué celebramos el fin de semana del Día de Muertos (que cabe decir que se prolonga más cada año).
¿Día de Muertos? No lo creo (al menos que seas Michelle Remond o alguna de mis tías). ¿Jalogüín? Tampoco, y además, Polo Polo nos regañaría ("Las costumbres mexicanas se nos están yendo como agua entre los dedos"). ¿El puente? Posiblemente, pero sin las anteriores no habría puente, así que digas ¿festejar festejar el puente?... no. ¿Entonces?
Digamos que hay un momento de la vida en que cualquier pretexto es bueno pa'echar desmadre. Con ese entendido, motivado por un pre-halloween medio twisted, el buen Carrillo organizó una peda-fiesta-rave-concurso en el que el disfraz era obligatorio. Bien cabe (¿?) destacar que estas reuniones en la casa Carrillo-Sánchez se han vuelto de culto, pero ya hay algunos constantes asistentes que reclaman una fiestecita para conocernos como somos. ¿Cómo somos? El disfraz es la ventana de mi corazón, ¿qué más quieren?
En fin. Como buen mexica, dejé la búsqueda del disfraz hasta el último minuto. Neceaba yo con que mi abuelo, Afif Bin Nagib Said, debía tener algún atuendo típico del Líbano hoy tan abatido. Resulta que no, porque alguien le hurtó del clóset-tumba que habitaba en mi cuarto hasta hace algunos años. Entonces recurrí al pariente cercano libanés y salió mejor el asunto. Salí con una túnica al estilo Yaser Arafat, una manta negra con hilo dorado y violá: Osama Bin Britny.
El trajecito estaba de poca madre y se redondeó con un delineado de ojos que me duró dos días (ahí me tienen puteando en CU en el ojito pintado). Sin embargo, valió la pena. Que llega el Capitán América pero de Coyoacán, y que se arma la lucha eterna entre el bien y el mal, la Jihad vs. el Eternal Freedom. Les invito a ver cómo resolvió Osama Bin Britny dicha afrenta en el blog de Paul, antes de terminar más bien pareciéndose a Jack Sparrow.
Yo iba por el trono absoluto del mejor disfraz, pero debo aceptar que la chacha embarazada me mató, porque además se puso una peda memorable y se puso a zorrearle al Espantapájaros, al Abuelo y al mismo Capitán América. Qué más da. Ya habrá más pedas con disfraz, de eso estoy seguro.
Para Jessica Soda, gracias por el atuendo. http://palassauzet.spaces.live.com/ (En el apartado de Fiesta de Halloween, chequen las fotos de la 13 a la 19 para la secuencia).
¿Día de Muertos? No lo creo (al menos que seas Michelle Remond o alguna de mis tías). ¿Jalogüín? Tampoco, y además, Polo Polo nos regañaría ("Las costumbres mexicanas se nos están yendo como agua entre los dedos"). ¿El puente? Posiblemente, pero sin las anteriores no habría puente, así que digas ¿festejar festejar el puente?... no. ¿Entonces?
Digamos que hay un momento de la vida en que cualquier pretexto es bueno pa'echar desmadre. Con ese entendido, motivado por un pre-halloween medio twisted, el buen Carrillo organizó una peda-fiesta-rave-concurso en el que el disfraz era obligatorio. Bien cabe (¿?) destacar que estas reuniones en la casa Carrillo-Sánchez se han vuelto de culto, pero ya hay algunos constantes asistentes que reclaman una fiestecita para conocernos como somos. ¿Cómo somos? El disfraz es la ventana de mi corazón, ¿qué más quieren?
En fin. Como buen mexica, dejé la búsqueda del disfraz hasta el último minuto. Neceaba yo con que mi abuelo, Afif Bin Nagib Said, debía tener algún atuendo típico del Líbano hoy tan abatido. Resulta que no, porque alguien le hurtó del clóset-tumba que habitaba en mi cuarto hasta hace algunos años. Entonces recurrí al pariente cercano libanés y salió mejor el asunto. Salí con una túnica al estilo Yaser Arafat, una manta negra con hilo dorado y violá: Osama Bin Britny.
El trajecito estaba de poca madre y se redondeó con un delineado de ojos que me duró dos días (ahí me tienen puteando en CU en el ojito pintado). Sin embargo, valió la pena. Que llega el Capitán América pero de Coyoacán, y que se arma la lucha eterna entre el bien y el mal, la Jihad vs. el Eternal Freedom. Les invito a ver cómo resolvió Osama Bin Britny dicha afrenta en el blog de Paul, antes de terminar más bien pareciéndose a Jack Sparrow.
Yo iba por el trono absoluto del mejor disfraz, pero debo aceptar que la chacha embarazada me mató, porque además se puso una peda memorable y se puso a zorrearle al Espantapájaros, al Abuelo y al mismo Capitán América. Qué más da. Ya habrá más pedas con disfraz, de eso estoy seguro.
Para Jessica Soda, gracias por el atuendo. http://palassauzet.spaces.live.com/ (En el apartado de Fiesta de Halloween, chequen las fotos de la 13 a la 19 para la secuencia).
2 comments:
Con lo de buscar ser "ú.n.i.c.o" y decidir ser juez de todo el mundo, valdría la pena ser más cuidadosito con la ortografía. Y aguas, que habemos muchos chilangos, orgullosos de serlo, por razones de bastante más peso que las que consideras "la esencia chilanga".
pa que el famoso "comment" anonymus se vea huérfano, a mí me hizo cagar de la risa el post, y las fotos de osama bin britny aun más... yo le si le voy le voy a los pakis
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