ADVERTENCIA: Este post no es apto para quien no sea capaz de leer una postura sobre el amor, tan válida como cualquier otra. Luego no digan que no dije.
El apunte de Juanito fue la gota que derramó el blog, y aquí se viene un desglose de una de las premisas más controvertidas de u.n.i.c.o.
EL AMOR ES SENCILLO.
Sí. Tan sencillo como lo más sencillo. La verdad. Y estoy hablando del amor amor. Del amor deadeveras. Del amor que se disfruta más de lo que se sufre. En el que uno le entra a los catorrazos sabiendo que éstos serán los menos porque precisamente hay amor.
Sin embargo, creo que tengo que remontarme a un antecedente cultural para explicarme mejor.
Venimos (e incluyo aquí a los mexicanos occidental-like, educados en el maravilloso gremio de la clase media, media-alta, alta, y con severa exposición a los paradigmas que han reinado los últimos 50 años en este país)… decía, venimos programados con toda una serie de prejuicios que en general predican el no-placer de las cosas. Es el síndrome José José (¿va por ahí Juanito?). Amar y querer no es igual. Es decir, mientras más sufrimos, más amamos. Si no lloramos, no estamos amando de verdad. ¿Cuántas pinches veces de niños no vimos alguna escena (vida real o vida t.v.) en la que un imberbe le decía a un adulto (o algo por el estilo): ‘¿por qué lloras?’… ‘pues por cosas del amor, estás muy pequeño para entenderlo...
Madres. Desde ahí empieza el asunto. Se nos vende (y me refiero a familia y mamá tele) que el ‘verdadero’ amor es más difícil que contarle los pelos a un chango. Rara vez se inculca el amor como una actividad placentera. Medítenlo y échense un flashback.
Tal vez sea que estoy hablando desde mi perspectiva, pero la neta no creo que sea taaaan distinta a la que tienen los miles y millones de lectores de u.n.i.c.o. (perdón, está subiendo el rating). Mis abuelos, por ejemplo, se jactan de amarse con toda el alma, y la verdad es que no se soportan en lo absoluto. Se aguantan. Ya no tienen de otra. Tal vez se amaron mucho en algún momento, pero hoy ya no. Sin embargo, a ellos a su vez les inculcaron, seguramente a punta de cinturonazos, que el amor, o mejor dicho ‘el amor’, era para siempre. Y punto. Tons se chingan.
A lo que voy es a esto: el amor es sencillo, pero no eterno. Puede acabar muy pronto. O durar mucho y acabarse. O nunca acabarse. Pero cuando es amor, no cuesta trabajo. ¿Cuántas veces hay peleas en el amor y cuántas veces uno se reconcilia con harta facilidad (y placer, jaja) porque el amor es verdadero y prevalece? Pero cuando las peleas siguen y siguen y siguen… ¿qué es lo primero que brinca: estaré en el lugar adecuado, con la persona adecuada?
El amor es sencillo, pero no es fácil. Sí sí. Implica sacrificios y a veces aguantar cosas… pero no cuesta trabajo. El amor es sencillo, pero no es inmediato (bueno, a veces sí). Uno tarda en entender si en verdad está enamorado. Todo radica en cuán sencillo es el asunto. Esa frasesita de ‘es que todo se dio poca madre’ no es más que la reafirmación de que el amor es realmente muy sencillo.
Se puede estar enamorado, se puede creer estar enamorado, se puede estar enamorado sin ser correspondido, se puede intentar enamorarse. Todas son válidas, sólo una es sencilla. La deadeveras. Cuando las cosas se complican, es relativamente sencillo resolverlas. Las relaciones humanas son complejas en general, el amor es sencillo.
Aquellos que salieron con el jitomate en la mano, piensen si cuando se sintieron aludidos por la premisa… tal vez no fue porque se les estaba complicando algún amor, perdón, “amor”. No sé. Tal vez me equivoque. Pero en mi caso así ha sido. Ahora no estoy enamorado, pero la verdad es que no quiero, ni deseo, ni tengo tiempo para complicarme la vida con tal de enamorarme. Porque creo firmemente que el amor es sencillo y que si llega, llega. Como dice Pepe Toño, si es para ti aunque te quites, si no es para ti, aunque te pongas.
Sencillo, ¿no?
Para la vida pues.
El apunte de Juanito fue la gota que derramó el blog, y aquí se viene un desglose de una de las premisas más controvertidas de u.n.i.c.o.
EL AMOR ES SENCILLO.
Sí. Tan sencillo como lo más sencillo. La verdad. Y estoy hablando del amor amor. Del amor deadeveras. Del amor que se disfruta más de lo que se sufre. En el que uno le entra a los catorrazos sabiendo que éstos serán los menos porque precisamente hay amor.
Sin embargo, creo que tengo que remontarme a un antecedente cultural para explicarme mejor.
Venimos (e incluyo aquí a los mexicanos occidental-like, educados en el maravilloso gremio de la clase media, media-alta, alta, y con severa exposición a los paradigmas que han reinado los últimos 50 años en este país)… decía, venimos programados con toda una serie de prejuicios que en general predican el no-placer de las cosas. Es el síndrome José José (¿va por ahí Juanito?). Amar y querer no es igual. Es decir, mientras más sufrimos, más amamos. Si no lloramos, no estamos amando de verdad. ¿Cuántas pinches veces de niños no vimos alguna escena (vida real o vida t.v.) en la que un imberbe le decía a un adulto (o algo por el estilo): ‘¿por qué lloras?’… ‘pues por cosas del amor, estás muy pequeño para entenderlo...
Madres. Desde ahí empieza el asunto. Se nos vende (y me refiero a familia y mamá tele) que el ‘verdadero’ amor es más difícil que contarle los pelos a un chango. Rara vez se inculca el amor como una actividad placentera. Medítenlo y échense un flashback.
Tal vez sea que estoy hablando desde mi perspectiva, pero la neta no creo que sea taaaan distinta a la que tienen los miles y millones de lectores de u.n.i.c.o. (perdón, está subiendo el rating). Mis abuelos, por ejemplo, se jactan de amarse con toda el alma, y la verdad es que no se soportan en lo absoluto. Se aguantan. Ya no tienen de otra. Tal vez se amaron mucho en algún momento, pero hoy ya no. Sin embargo, a ellos a su vez les inculcaron, seguramente a punta de cinturonazos, que el amor, o mejor dicho ‘el amor’, era para siempre. Y punto. Tons se chingan.
A lo que voy es a esto: el amor es sencillo, pero no eterno. Puede acabar muy pronto. O durar mucho y acabarse. O nunca acabarse. Pero cuando es amor, no cuesta trabajo. ¿Cuántas veces hay peleas en el amor y cuántas veces uno se reconcilia con harta facilidad (y placer, jaja) porque el amor es verdadero y prevalece? Pero cuando las peleas siguen y siguen y siguen… ¿qué es lo primero que brinca: estaré en el lugar adecuado, con la persona adecuada?
El amor es sencillo, pero no es fácil. Sí sí. Implica sacrificios y a veces aguantar cosas… pero no cuesta trabajo. El amor es sencillo, pero no es inmediato (bueno, a veces sí). Uno tarda en entender si en verdad está enamorado. Todo radica en cuán sencillo es el asunto. Esa frasesita de ‘es que todo se dio poca madre’ no es más que la reafirmación de que el amor es realmente muy sencillo.
Se puede estar enamorado, se puede creer estar enamorado, se puede estar enamorado sin ser correspondido, se puede intentar enamorarse. Todas son válidas, sólo una es sencilla. La deadeveras. Cuando las cosas se complican, es relativamente sencillo resolverlas. Las relaciones humanas son complejas en general, el amor es sencillo.
Aquellos que salieron con el jitomate en la mano, piensen si cuando se sintieron aludidos por la premisa… tal vez no fue porque se les estaba complicando algún amor, perdón, “amor”. No sé. Tal vez me equivoque. Pero en mi caso así ha sido. Ahora no estoy enamorado, pero la verdad es que no quiero, ni deseo, ni tengo tiempo para complicarme la vida con tal de enamorarme. Porque creo firmemente que el amor es sencillo y que si llega, llega. Como dice Pepe Toño, si es para ti aunque te quites, si no es para ti, aunque te pongas.
Sencillo, ¿no?
Para la vida pues.
11 comments:
Ser "amantes" realmente, como se quiera tomar y si se cree que es también por el lado sexual, ni pex, que así sea.
Amantes en toda la extensión de la palabra. Algo menos que eso es "poco amor" y, por ende "no es amor que perdure".
Apenas voy para tres años de casados y cinco de novios. La amo, y el buen u.n.i.c.o. sabe a quién me refiero.
Hoy debo decirlo: Nothing's impossible...
Amor inphidélico.
Coincido contigo totalmente y amor etero... el de una madre por su hijo.
Besos
Bri, si el amor es tan sencillo, por qué es tan largo este post?
El amor en la sencilla elección de aceptar las complejidades mutuas. Coincido en que es simple y llano, pero no fácil.
Amar y sus sinónimos perdonarse, acompañarse, negociar, disfrutarse, definitivamente requieren de cierto esfuerzo y de madurez. Eso no se da solito ni espontáneo, se trabaja.
tú y el señor dehesa deberían de escribir libros de "aprendiendo a vivir o cohabitar con sencillez"
*por cierto contra todos (pero tooodos los pronósitcos me he unido al club de ¿a dónde vas? R: a MÍ departamento... próxima invitación esté pendiente
me gusto...
HMI
ciertamente amar es sencillo pero el amor no lo es jeje
estoy de acuerdo con mac!
Como dices el amor es sencillo, pero complica la vida, no se explica se siente. Cuando no amas existes, cuando amas vives. Mientras existe es eterno, lo dijo de otra manera García Márquez, y hay gente propensa a hacer de cualquier paseo de mano sudada un acontecimiento melodramático, cursi y acaramelado, y otros para los que pueden amar o dejar de amar (según ellos) como quien se prueba un vestido en al tienda. Y sí hay amores que se eligen y otros que te llegan y son irrenunciables como dijo Ixchel, como por ejemplo, querer a un hijo es algo que se te encarna y que te vuelve siempre en el segundo en tu lista de prioridades, eso también es amor.
Trabaja como si no necesitaras el dinero, ama como si nunca te hubieran lastimado y baila como si nadie estuviera mirando. Bono
Totalmente de a cuerdo, es sencillo! lo que me pasó fue que me pareció todo tan sencillo,como nunca había sido sencillo, que entonces ahora siento algo de "desinterés", algo de "amorcito" me explico?, como esta vez no resultó ser arrebatado, pasional y desgarrador siento que le hace falta mucha pasión a mi supuesta relación. Entonces siento mil ideas en mi cabeza, ¿cuando sólo debería dejar que siga así? después todo va sencillo digamos que todo se ha dado Poca madre!
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